"HACER LA AMERICA III"


Otras naves y otros hombres se hicieron a la mar,
aventureros, prófugos, iletrados y filibusteros
respondiendo a la codicia del carente de lar,
delegados fieles del poder embustero.

Su misión era robar por ley de corso,
su presa ... cualquiera, la primera
o aquella infeliz que débil cayera
en la feroz trampa del vil engañoso.

Abordaje en mar abierto
o depredación en tierra adentro,
sangrientas acciones del hombre incierto,
pueril historia del gran desencuentro.

Vastas culturas sacrificadas en el intento
de descubrir y capturar nuevos feudos,
diezmadas civilizaciones por el hombre cruento
alumbraron vicios en seres horrendos.

Guerrero por necesidad eximido de elección
su vida valía menos que un doblón,
era muerto lato, en el mar o en la prisión,
su presa y el botín ... su mayor ambición.

Sin principios morales, a matar o morir,
condenado a ese destino por la miseria,
ignorante de su esencia, pura histeria
arrastró por los anchos pontos el duro sufrir.

Hombres enfermos atacados de infortunio,
maltratados, confundidos y aturdidos,
carnes de cañón, de sentimientos espurios
mestizaron razas, dejando pueblos heridos.

Un mundo nuevo, al decir del invasor,
fue víctima del procaz conquistador,
ignorante ... esquizofrénico hijo del fuego
sembrador de muerte y saqueador.

Feroz en su lucha contra el indefenso
acorazado su cuerpo de broncíneas armaduras,
sufrió castigos del heroico ofenso
de pechos desnudos y escudos de plumas.

Misiones de sombras salidas del averno,
portando estandartes de falaces culturas,
quemaron milenios en ansias oscuras,
malditas y estrechas de infelices inviernos.

¡Para Hacer la América, homres libres del mundo respetad!