SEÑORA MIRTA LEGRAND, la vejez, que suele traer la ancianidad, desgraciadamente pone de relieve, todo aquello que no hemos aprendido en nuestra edad de acceder al conocimiento y que se manifiesta en una aguda desconección con la realidad, o dicho científicamente en la "senectud", que de acuerdo al "mataburros" de la Editorial Sopena - Lengua Española, adquiere con justeza la siguiente calificación:
SENECTUD: Edad senil. Ultimo período de la vida, que comienza a los sesenta años.
SENIL: Perteneciente o relativo a los viejos o a la vejez. Dícese de la muerte que viene por pura
vejez o "DECREPITUD", sin accidente o enfermedad, por lo menos en apariencia.
DECREPITUD: Suma vejez. Chochez, que chochea.
CHOCHEAR: Tener debilitadas las facultades mentales y obrar como alelado, por la mucha edad
Señora, lamento tener que evidenciar una realidad de la vida, pero, sin lugar a ninguna duda, es el resultado del paso del tiempo y causa de un reloj cronológico imposible de detener. No obstante, tampoco es tiempo de desesperar porque siempre se cuenta con célebres compañías, por ejemplo, el malemérito Mariano Grondona, la muñequita televisiva Susy y muchos otros que superaron los sesenta años y siguen chocheando a la par, por caso el Héctor Magnetto.
¡No hay que desesperar, viene solo y no tiene remedio!