LA HISTORIA SE REPITE: La política sucia, imberbe, rastrera, traicionera a los intereses del país, se muestra a cara descubierta. Los agnósicos reunidos en una sola letra la "A", la única que han aprendido, porque ya la "B" les resulta demasiado difícil de comprender. Esa rama estúpida de legisladores, la mayoría representando a las provincias, son suicidas inútiles, porque actuando como lo hacen creyendo poner en aprietos o perjudicar a la Presidenta, lo único que pueden lograr es poner en serio riesgo a sus compatriotas.
Es visto y comprobado que estos energúmenos representan en sus respectivas provincias a los siempre vagos dedicados a robar y vivir de lo que el Estado les cede en favor de una existencia turística. Son socialmente válidos frente a un carnet que los acredita como legislador, pero desprendidos de esa máscara no valen absolutamente un cobre. Serían mendrugueros de tener que sobrevivir de su inteligencia. Paupérrimos intelectuales vendidos por mendrugos al mejor postor. Lo mejor que le sucede al país es que resultan aves de paso, nunca llegan a ser algo más que un simple embaucador de sentimientos; difícilmente se les puede caer una idea y si de casualidad sucede lo contrario, para la felicidad de los habitantes de nuestro país, antes de caer al piso, debemos barrerla al tacho de basura, porque seguramente en instantes dejará olor a podrido.
Nombrarlos es sacarlos a la luz y por ello es imprescindible que se mantengan en la oscuridad, allí donde lo inútil se confunde con la imbecilidad. Son mayoría, hagamos un cálculo: 232 diputados y 69 senadores provinciales.
Lo inaudito es que están impregnados de un odio singular contra la inteligencia y la capacidad, fruto de una supina ignorancia. Los Poderes Ejecutivos Provinciales verán sufrir a sus pueblos por la acción suicida de estos mentecatos pagados de héroes de cartón.
Sería importante que reflexionaran (cosa difícil) de las atrocidades y barbaridades que cometieron, en algunos casos, cuando fueron gobierno y hablo de los radicales, fracasados consuetudinarios que cuando no abandonaron el poder en helicóptero, lo hicieron humillados con cesiones presurosas, siempre corridos por inútiles y con el sempiterno cuento del bienestar de la República, "guitarreo de boliche de cuarta".
Dejen de jugar al honorable, ustedes bien saben que jamás serán gobierno, porque los argentinos ya los conocemos. Dejen de mostrarse caracúlicos, que esa seriedad de fantasía está escondiendo la ignorancia que se les cae en la baba. El Hades será vuestra futura casa.