PASADO, PRESENTE Y FUTURO

En estos días del mes de agosto de 2010, he visto y escuchado a políticos y periodistas molestos porque se memoran hechos del pasado.
Generalmente, la molestia está enmarcada en traer al presente hechos macabros, manchados con sangre, torturas, asesinatos y robos; estos últimos incursos en tipificaciones de lesa humanidad.
Creo, que las personas que tratan de evadir y ocultar su pasado, se debe a una profunda culpabilidad que su espíritu rechaza y al que, en algún momento, deberán rendir cuentas.
Inútil hacer nombres de personajes incursos en la postura del olvido, son cientos, son miles.
Es preciso señalar, a mi juicio, para que se acceda al análisis de los tiempos materiales que en filosofía es en abstracto y naturaleza en positivo que, PASADO, PRESENTE Y FUTURO, es HOY, le duela o le cueste a quien le duela o le cueste.
Todos, sin excepción, debemos rendir cuentas, que fuimos y que somos. ¡No importa el Tiempo!
Abrir el paraguas cuando llueve y creer saber quien es el otro por su vestido, es propio del oportunismo y no tiene explicación vinculada a la inteligencia o sagacidad.
¡EL SAYO PARA QUIEN LE QUEPA!