lunes, 20 de diciembre de 2010

"LOS SUPER FANTASTICOS MACRI" por Yocrates

El gran Franco Macri, llegó a la Argentina en el año 1949, con 18 años de edad y sus hermanos menores, sin saber hablar el castellano. En el año 1951, después de haber trabajado en un obrador, es decir 2 años después y con 20 años de edad ya era empresario. Funda una empresa dedicada a la construcción.
Pero, el crecimiento más importante se produjo durante el gobierno de facto del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional, beneficiado por distintos negocios y condonaciones de deudas, siendo el caso más resonante en el año 1982, cuando Domingo Felipe Cavallo, a cargo del Banco Central de la República Argentina, estatizó en un proceso cuestionado la deuda privada de distintas empresas colaboradoras con el sistema como, Macri, Bridas, Pérez Companc, Bulgheroni, Renault Argentina, Grupo Clarín, Diario La Nación, Papel Prensa, etc., pasando a ser deuda ezterna argentina, ilegítima e ilegal y a cargo de cada uno de los argentinos.
Entre otras cosas, el niño Mauricio fue procesado en una causa por contrabando en exportaciones de la empresa Sevel. En el gerenciamiento y administración del Correo Central se olvidaron de pagar los cánones comprometidos y ahora al frente del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en su especialidad de gerenciar le pagó todo a sus parientes y amigos y dejó en bancarrota los servicios elementales para la subsistencia del pueblo de la Capital, abandonando hospitales, escuelas y la construcción de viviendas para los más necesitados, para direccionar las manos del tránsito vehicular y la implementación de bicisendas.
Brillante manera de gerenciar tiene este incapaz timonel de tormentas de humo. Los súper fantásticos Macri desde su pubertad han ejercitado el juego del estanciero. ¡No pongo, saco y no pago! Y todo eso le hace pensar al señorito Mauricio como hijo pródigo de rancia monarquía.
¿TENDRA MEMORIA ESTE HIJO DE LA IRREALIDAD? o ¿necesitará que alguien le dicte al oído lo que no alcanza a pensar? ¿Y quién tiene la culpa, papá o mamá?

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