CAMBALACHE por Yocrates.
Según lo especifica la Real Academia: "trueque de objetos de poco valor". A poco de andar oteando el horizonte político de nuestro país, podemos imaginarnos, siguiendo las vías que se entrecruzan portando nombres y estandartes de quienes compondrían carteles de posibles candidatos, a conformar grupos idóneos en ideales políticos, haciendo flamear banderas con consignas vacuas, sin sentido de horizontes probables de congeniar la inteligencia que aborde un camino dirigido a la auténtica fantasía de superar las trabas que amenazan la vivencia social, la congruencia de superar las dificultades, que nos ofrece el diario vivir, creando mejores condiciones para aquellos hermanos que sufren las condiciones más difíciles, para afrontar un desarrollo humano que lo incorpore al resto de la gran familia habitante de nuestro suelo. Eso, podría llamarse "cambalache".
La antipolítica, fruto de muchos años de errores queridos, embelesados por los espejitos y bolitas de colores, del capital mal habido y de la estafa moral al hombre de estas regiones del sur; la usurpación y el permiso de dirigentes inescrupulosos, que hicieron desaparecer la natural virtud y la generosidad de nuestro pueblo, creando el puente indeseado para el ingreso de la falacia y la corrupción.
Hoy superada la mentira y comprobada la bondad de nuestra aptitud para la creación de felicidad para nuestros compatriotas, desechemos "el cambalache" y defendamos los valores que tanto ha costado recuperar, pensando en abolir totalmente "el trueque" y afirmar la ruta trazada en estos últimos años.
Seamos sensatos y desarticulemos "el cambalache".
jueves, 27 de junio de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario